UN PEQUEÑO VOLADOR CON SOLO DOS AÑOS ANDUVO EN UN PARATRIKE

Las pasiones siempre se manifiestan desde pequeño y un niño huinquense lloraba cuando veía pasar un aladelta o paratrike queriendo subir y su madre le cumplió el sueño esta semana por lo que Iñaki fue feliz  recorriendo el cielo  del sur cordobés junto a su madre y un instructor.

Sol Peirano contó a IR Noticias Centro que la atracción de su hijo con estos aparatos para volar fue instantánea y estando en el patio de su casa se alteraba cuando veía pasar alguno volando y lo señalaba. En estos días supo que estaba en esta ciudad el instructor Guido Toselli, que es otro joven huinquense apasionado por los vuelos, y se coordinó una salida con Iñaki para ver si se podía cumplir su deseo.

Este martes , desde un predio aledaño al radio urbano huinquense , se organizó  el despegue con Sol el pequeño Iñaki y Toselli mientras los preparativos se vivieron con intensidad y serenidad esperando cada reacción del chiquito y observando sus comportamientos porque cualquier actitud negativa iba a ser motivo de supensión de la salida.

Todo fue felicidad para Iñaki desde el comienzo hasta el fin en un vuelo de unos veinte minutos alternando alturas entre los cien metros y picos de cuatrocientos mientras se iban observando las reacciones del chiquito que no paró de disfrutar cada instante. El paratrike es una vela impulsada con un motor que toma vuelo y se conduce también utilizando las térmicas del aire y corrientes, llegando a superar los cinco milmetros de altura si se dan las condiciones y con equipamiento especial.

La madre también se mostró feliz por la experiencia y destacó la predisposición y la responsabilidad en cada detalle del instructor ; «se nos ha cumplido un sueño y será algo que recordaremos de por vida, el llora cuando los ve volar y en todo momento estuvo contento como si fuera algo muy natural, disfrutamos mucho cada instante» dijo  Sol entusiasmada con su peque volador.